10 de junio de 2007

La ranchera chavista


De Hugo Chávez admiro su capacidad de reacción. Es un hombre al que le temo más cuando calla que cuando habla. Chávez calló durante la semana posterior al cierre de Radio Caracas Televisión, mientras los artistas y el personal de la planta denunciaban el atropello cometido. Lo imagino ante un panel de televisión midiendo el impacto de la manifestación estudiantil que se opuso a la medida. Durante esta semana el Gobierno ha organizado un contraataque feroz. Mucho me temo que mientras escribo esta nota se haya diluido el impacto inicial que la decisión de terminar la concesión causó en el chavismo.

Es cierto que después de ocho años esta es la primera medida que enfrenta al público que admira a Chávez con la arbitrariedad que caracteriza al Presidente. También es cierto que es la primera vez que el discurso de la libertad de expresión y la democracia ha bajado de su torre de marfil para instalarse en la cotidianidad del pueblo llano. Finalmente podemos exhibir una prueba concreta que limita nuestra capacidad de elegir qué quéremos hacer. Pero no es menos cierto que esa certeza y la robusta presencia estudiantil en las calles del país no basta para decir que "Chávez está técnicamente caído".

El domingo 10 de junio Oscar Schemel, de Hinterlaces, afirma en El Universal que "las recientes medidas tomadas por el presidente Chávez son percibidas como autoritarias por el 63% de la población. El arrastre del jefe del Estado va en franco descenso". Yo sinceramente no lo creo. Chávez, que obviamente no midió el impacto que la decisión tendría incluso entre los suyos, tiene aún muchas cartas bajo la manga. Además, considero que hay que esperar que baje la marea para medir con certeza si la popularidad del Presidente va cayendo. ¿Se puede hacer una lectura seria de la merma de la popularidad cuando apenas han transcurrido 15 días del cierre de RCTV y no ha disminuido la conmoción? Calma y cordura, decía el viejo Eleazar López Contreras. Nadie puede celebrar que el fin está cerca. Chávez todavía sigue siendo el rey.